Travesti mexicana aún morrilla, usa la ropa de la hermana para vestirse como toda una nena y para coger con el vecino que tiene como amante. Y no nos hagamos pendejos, ni es para que nos de pena, pues como decía mi abuelo, "En tiempos de guerra, cualquier hoyo es trinchera". O si prefieres verlo de otra forma, "siendo hoyo, aunque sea de pollo". Al parecer, el caliente vecino de esta mariquita, le parece muy chido que ella se vista de colegiala para que se la coja como a una puta. Pues la travesti solo se levanta la falda y se empina ofreciéndole el culo a su cachondo amante. La neta, creo que unas cuantas copas, la mayoría de nosotros al verla vestida así, si le andamos empujando los frijoles a esta mariquita mexicana.
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