Impresionantes diálogos de una madre real, que pide a su hijo que se venga en su boca porque quiere sentir su leche después de culiarla. Es un hecho que el incesto existe porque a veces es imposible controlas nuestros deseos más sucios. Pero no podemos negar, que entre más tabús y más limites morales rompemos, es más excitante. Esta madre y su hijo, descubrieron el infinito placer que se consigue teniendo sexo sin ningún límite entre ellos. Mientras la madre le chupa la verga a su hijo, él pregunta cuanto le gusta hacerlo y ella le responde que le encanta y además le pide que se venga en sus labios para probar su leche. Pensando en no permitir que se le baje lo excitado al hijo, le pide que se la culié como ya lo hizo unos momentos antes. Ella se pone de estilo perro y su hijo la penetra desde atrás. Haciendo gemir de tanto placer a la ardiente madura, mientras ella dice lo mucho que disfruta coger con su hijo. Cuando el chico le avisa que se va a venir, ella rápidamente ofrece su boca para recibir toda la leche. Finalmente, ella se traga el semen de su propio hijo, como si fuera una mujer cualquiera, una puta que se culea su hijo y no la propia madre.
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