Le encanta la verga del mejor amigo de su esposo a esta casada infiel que se escapa al motel con el wey para que le dé su verguiza. Como casi todos los amantes, ellos aprovechan que el pendejo del marido está trabajando para irse a ponerle chingón a un motel. La rica casada gordibuena se pone a cuatro patas y espera a que su amante se acomode atrás de ella para comenzar a empujarle la verga. Rápidamente, comienza a escucharse el ruido que hacen sus grandes nalgas, cuando su amante se la empuja hasta que chocan sus huevos contra ella. El amigo del marido, sabe que a la puta le encanta que la traten rudo y como una perra y la jala del pelo mientras se la clava. Pero la neta, si le encanta tanto la reata a la infiel casada, debería buscarse un carbón que le dura al menos 10 minutos y no los dos que le aguanto este wey.
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